GUIA DE MADERAS PARA MUEBLES
La madera es uno de los productos más nobles y de gran valor que existen en el mercado. Sus subproductos se utilizan para diseñar y fabricar desde mobiliario hasta elementos artísticos.
En la actualidad podemos encontrar un gran abanico de tipos de maderas. Cada una de ellas cuenta con una esencia única, aportando así un grado de calidez, carácter y belleza diferente a cualquier otra.
En esta pequeña guía encontrará los tipos de madera más utilizados en el sector del mueble y la decoración así como sus propiedades. De esta forma podrá saber fácilmente cuál es la que mejor se adecúa a su proyecto.
En este artículo también podrá saber la razón por la que el tablero aglomerado de densidad media (tablero DM) es uno de los materiales más utilizados en la fabricación de muebles y por qué es un gran aliado hoy en día en este ámbito.
MADERA DURA Y MADERA BLANDA
De una forma rápida la madera puede clasificarse en dos segmentos: maderas duras y blandas.
Las maderas duras son las que provienen de árboles de hoja caduca, cuyo lento crecimiento les permite tener una mayor densidad, por lo que su precio también suele ser más alto. El color de este tipo de madera es más bien oscuro y los muebles que se construyen con ellas son más resistentes en el tiempo. Ejemplos de este tipo de madera son roble, olmo, arce, nogal, haya, abedul o caoba.
Por su parte las maderas blandas se obtienen de árboles de hoja perenne. Su ritmo de crecimiento es más rápido, lo que permite ver fácilmente los anillos de crecimiento anual en su tronco. Su color es más bien claro siendo el pino, el abeto o el cedro una muestra de este tipo de madera.
Aunque la madera blanda se percibe como un material de menor calidad, el 80% del mobiliario fabricado hoy en día se basa en ella.
TIPOS DE MADERA MÁS USUALES
A continuación explicamos brevemente algunas de las maderas más utilizadas en el sector del mueble a nivel nacional.Es posible que esta lista pueda ser más amplia, pero queríamos mostrar una idea general con las más comunes hoy en día.
HAYA
La madera de haya se caracteriza por ser dura, fuerte y pesada. Su tonalidad es clara aunque el tiempo y los tratamientos que se le apliquen hacen que adquiera una tonalidad rojiza.
Actualmente existen dos tipos de madera de haya: la americana y la europea. Esta última es más resistente y cuenta con mejores propiedades elásticas y mecánicas.
Es una madera fácil de trabajar, lo que permite utilizarla en la fabricación de muebles, aportando un plus de calidez a la estancia.
Tal y como hemos comentado anteriormente, la madera de haya admite diferentes tratamientos, siendo la vaporización uno de ellos. Este proceso reduce las tensiones internas, disminuyendo así los riesgos de deformación de la madera, uno de sus grandes inconvenientes.
ROBLE
La madera de roble es una de las más utilizadas y las razones son múltiples: fácil de trabajar, resistente, dura, necesita poco mantenimiento y cuenta con un gran abanico de acabados lo que permite obtener productos con muy buena relación calidad y diseño.
Los muebles construidos con madera de roble son símbolo de garantía dado su buen acabado, por lo que suele utilizarse en mobiliario de gama alta.
Al existir una gran variedad de especies en el mundo, podemos encontrar diferentes tonalidades, pasando de los marrones claros a oscuros (roble europeo), tonos más blanquecinos (roble americano), rojizos o amarillos.
CAOBA
La madera de caoba fue una de las primeras maderas tropicales en introducirse en Europa. Su gran resistencia, durabilidad, elegancia y versatilidad la convirtieron en uno de los materiales más apreciados del mercado.
Su precio es más elevado en comparación con otros tipos de madera. Parte debido a sus características pero también a su sobreexplotación.
Las tonalidades de la madera de caoba van del rojizo al marrón y se va oscureciendo con el paso del tiempo, dado lugar a un color intenso.
En el sector del mueble, la madera de caoba se utiliza para mobiliario elegante y de gama alta, por lo que siempre suele asociarse con cierto status económico.
ARCE
La madera de maple americano o de arce se clasifica dentro de las maderas duras y es una de las más polivalentes que existen. En la actualidad se desglosan en dos tipos: dura y suave.
La madera de arce dura presenta una gran resistencia la torsión, a los golpes y al desgaste. La madera de arce suave a pesar de ser más ligera presenta una buena resistencia a la deformación. Estas características la convierten en el aliado perfecto para aquellos productos que necesiten resistir años de desgaste.
El color de la madera de arce es más bien claro y uniforme. Además no suele presentar ningún defecto (aunque puede encontrarse algún nudo o mancha ocasionalmente).
La madera de arce dura se suele utilizar en la fabricación de muebles de calidad mientras que la suave suele destinarse para la fabricación de tableros aglomerados o incluso para estructuras interiores de muebles.
NOGAL
La madera de nogal es una de las mejor consideradas en Europa. No sólo por su belleza (vetas, dibujos y sus tonalidades particulares) sino también por ser una de las maderas más densas, duras, resistentes al paso del tiempo y estables frente a cambios de temperatura y humedad.
El precio de la madera de nogal es de los más altos que existen en el mercado, sobre todo para ebanistería, fabricación de muebles de calidad o para chapados.
La madera de nogal presenta una variedad de colores que pasan del marrón claro al chocolate oscuro, mientras que la albura puede tener tonalidades grisáceas e incluso amarillas, por lo que resulta muy interesante para contrastar con otras maderas de colores más claros.
PINO
La madera de pino es una de las más utilizadas dada su abundancia, su resistencia, facilidad para trabajar y versatilidad.
Actualmente existen más de un centenar de especies diferentes. Por norma general sus tonalidades pasan de un tono blanquecino a un color marrón claro e incluso rojizo. Otro detalle a tener en cuenta es la presencia de nudos.
Es una madera más bien ligera y al no ser muy dura suele utilizarse en la fabricación de mobiliario de estilo rústico, aunque tratada previamente para evitar problemas ante variaciones de humedad o temperatura.
PRODUCTOS Y SUBPRODUCTOS DERIVADOS DE LA MADERA
Cuando vamos a elegir un mueble para nuestro hogar buscamos información sobre qué material es mejor. Sin embargo lo que recibimos es una cantidad de información que nos confunde aún más.
A continuación explicaremos los diferentes productos y subproductos de la madera que podemos encontrar en el mercado teniendo en cuenta sus pros y contras.
1. MADERA CONTRACHAPADA
La madera contrachapada es un tablero elaborado a partir de finas chapas de madera pegadas con resinas sintéticas mediante presión y a una temperatura de 140 ºC.
Las chapas que se van uniendo van alternando las direcciones de la veta, consiguiendo así una mayor uniformidad y resistencia en todas las direcciones.
Este tipo de subproducto apareció en el antiguo Egipto, aunque no fue hasta los siglos XVIII y XIX cuando los encontramos en mobiliario de alta calidad.
Este tipo de madera es fácil de trabajar sin que pierda resistencia estructural, por lo que suele utilizarse para estructuras curvadas en los muebles.
Aunque pueden utilizarse maderas como el pino para elaborar madera contrachapada es mejor utilizar maderas más duras como el nogal.
Esta técnica mejora notablemente la estabilidad dimensional del tablero obtenido respecto de madera maciza, aunque existe la posibilidad de que existan puntos débiles originados por los nudos de la madera o incluso espacios vacíos.
Es por ello que actualmente aunque la madera contrachapada se sigue utilizando está siendo desplazada poco a poco por otros productos como los tableros MDF.
La chapa es una delgada lámina de madera que se pega sobre otras maderas o tableros como MDF, contrachapados o aglomerados, con el fin de obtener una madera con una apariencia superior a un coste sensiblemente inferior.
El grosor de la chapa de madera puede variar entre 3 y 8 mm y su obtención se consigue mediante dos métodos: a la plana en la que se va cortando capas paralelas el tronco del árbol mediante cuchilla o por desenrollo, que consiste enfrentar el tronco del árbol a una cuchilla mientras éste gira sobre sí mismo.
Muchas personas creen que los muebles chapados son más baratos que la madera maciza. Sin embargo, las carillas se utilizan con frecuencia en muebles de alta gama y pueden ser más costosas que la madera maciza. Son los tableros más utilizados para construir muebles no sólo por la demanda actual de naturalidad y calidez sino también por todas las ventajas que presentan:
- Evita la sobreexplotación de algunas especies de árboles.
- A diferencia de los laminados se puede reparar sin excesivas complicaciones.
- El resultado en los cantos es mejor que el que se obtiene en los laminados.
- Utilizar chapas permite fabricar muebles de algunas especies de madera que normalmente presentan problemas ante variaciones de humedad y temperatura.
- Fabricar chapa de madera requiere menos energía, por lo que es un proceso más ecológico.
La forma de averiguar si su mueble está chapado es mirando los bordes y verificando si las líneas de grano se extienden desde la parte superior y sobre los bordes de la madera. Como una chapa es de madera real, aceptará manchas y acabados como la madera sólida.
2. CHAPA NATURAL DE MADERA
3. TABLERO DE MELAMINA
Desde hace algunos años la utilización de la melamina en el sector del mueble ha ido aumentando. A pesar de ser múltiples sus ventajas, en términos de calidad aún suscita dudas. Es por ello que a continuación explicaremos qué es y sus características.
La resina melamínica es un compuesto químico con el que se impregna la lámina decorativa, que no es más que un papel que lleva impreso el diseño que finalmente tendrá el tablero. Este papel ya impregnado se une a una base mediante la aplicación de presión y temperatura.
Los avances tecnológicos han permitido mejorar las propiedades de la resina melamínica, consiguiendo que hoy en día sea una barrera perfecta ante la humedad, los agentes químicos, la abrasión y el rayado.
Por su lado la innovación en el ámbito de la impresión ha permitido obtener reproducciones cada vez más realistas incluyendo diseños y texturas que cada vez se asemejan más a los acabados naturales.
Sin embargo al igual que cualquier otro producto, presenta algunos inconvenientes que hay que tener en cuenta:
- Difícil de cortar. Las bases a las que se une la lámina decorativa tienen unas propiedades especiales que hacen necesaria la utilización de maquinaria específica.
- No se puede reparar. A diferencia de las chapas naturales o los tableros de madera maciza que aceptan tratamientos como lijados y barnizados, en este tipo de producto no es posible aplicarlos, por lo que ha de cambiarse por completo.
- Telegrafiado. Si la base del tablero no es de buena calidad es normal que con el paso del tiempo vayan apareciendo desperfectos.
- Es necesario cantear. Dado que la base no es estética, es necesario colocar terminar el tablero con chapas evitando que se vea el interior. Actualmente la mayoría de los fabricantes utilizan para ello PVC, cuya durabilidad y resistencia mejorar la calidad del producto una vez terminado.
El grosor de los tableros melamínicos que ofrecen las firmas de muebles hoy en día varía entre los 19 mm hasta los 50 mm. Hay que tener en cuenta que no hay una relación directa entre calidad y espesor, ya que tal y como hemos comentado anteriormente es el soporte al que se una la lámina decorativa es el que determina la calidad del producto final. Pero ¿cuáles son esas bases?
AGLOMERADO
El aglomerado es un tablero que se fabrica a partir de virutas de madera que se unen con resina y se prensan.
El aglomerado es un material estable, de consistencia uniforme, relativamente frágil ante tracción y vulnerable ante la humedad. Por todo ello su precio es bajo, convirtiéndolo en la base perfecta en la fabricación de muebles económicos.
MDF
Los tableros de densidad media o conocidos comúnmente como MDF (por sus siglas en inglés Medium Density Fibreboard) se obtienen a través de un proceso seco en el que se desfibran las virutas de madera, obteniendo partículas mucho más finas que en el los tableros aglomerados. Estas partículas se mezclan con resinas y se comprimen a alta presión y temperatura.
El resultado es un producto con una superficie más homogénea, más denso, menos poroso y más resistente que el aglomerado, pudiéndose trabajar como si se tratara de madera maciza. Todo ello hace que el coste del tablero MDF sea superior al del aglomerado.
CONCLUSIÓN
Tras analizar las ventajas e inconvenientes de cada una de las maderas así como los productos derivados de ellas, lo único que podemos decir es que no existe el material perfecto. Pero gracias a la gran variedad de terminaciones y acabados que nos ofrecen los distintos fabricantes de muebles, es cada vez más sencillo encontrar una combinación que resuelva las necesidades del usuario, teniendo en cuenta su presupuesto y sus gustos.
Una pieza de mobiliario en su conjunto será de mayor o menor calidad no sólo por la madera utilizada, sino también por otros detalles como herrajes, diseño y proceso de montaje, elementos que normalmente no se tienen en cuento pero que sí influyen en el resultado final.
Si aún no estás seguro de qué tipo de mueble es el que necesitas, no te preocupes. Nuestros asesores te ayudarán a encontrarlo y estarán a tu disposición para aconsejarte y resolver todas las dudas que tengas.